Cuernavaca sonaba tanto en mi cabeza, que un día decidí ir a conocerla. Al fin y al cabo son sólo 85 los kilómetros que la separan del Distrito Federal, la gigantesca capital de México.
Cuernavaca, capital del estado de Morelos, es conocida como "La ciudad de la eterna primavera". Mucho de verdad hay en ello ya que su paisaje está colorido por miles de plantas con flor, como los tulipanes, jacarandás, jazmines o azucenas. Aparentemente su clima se encuentra entre los mejores del mundo. Sin embargo mi primera imagen fue la de una ciudad congestionada, sucia y muy ruidosa. Mi novia de aquel entonces me lo había advertido. Ella conocía Cuernavaca y no quería volver.
El Autopista lento como un domingo en hora pico. Mas tarde no fue fácil hacernos de un lugar para aparcar nuestro carro una vez que llegamos a la ciudad.
Por calles adoquinadas y de difícil caminar nos fuimos acercando al zócalo del lugar, como para comenzar por algún lado.
Desde los tiempos de los emperadores Aztecas, Cuernavaca fue adoptada como lugar de descanso para hombres que llegaban ahí por su benigno clima.
Con tan buen patrimonio histórico y arquitectónico de su pasado, y a tan poca distancia del Distrito Federal, es una lástima que no sepan sacarle mejor provecho. El descuido está ahí, a la vista de todos.
Paredes hacia adentro la cosa cambia. Hay muchas casas espectaculares y bien cuidadas, en donde se aprecia lo mejor del arte Mexicano en todo su esplendor.
Hubo un antes y un después en la historia de Cuernavaca. Es el terremoto que sufrió la ciudad de México en 1985. Fueron tantos los habitantes de la gran urbe que se mudaron al vecino estado, que Cuernavaca, La Ciudad de la Eterna Primavera, creció sin control alguno. Tanto, que hoy las lejanas serranías ya no se ven por el smog que tiene la atmósfera de Cuernavaca y sus pueblos satélites.
Ya de lejos se veía el Palacio de Cortés, una de las edificaciones del período virreinal más antiguas de todas entre las que aquí se encuentran, y uno de los platos fuertes de cualquier visita a Cuernavaca.
El pirata y conquistador Hernán Cortés uso esta fortificación como residencia en sus años en México.
Hoy en día, además de recorrer el palacio, que guarda un parecido muy grande con el Alcázar de Colón en Santo Domingo, República Dominicana, se puede visitar el Museo Cauhnáhuac que guarda celosamente toda la historia de Cuernavaca, desde la época prehispánica hasta la revolución campesina liderada por Emiliano Zapata.
Uno en México está acostumbrado a zócalos importantes y de gran tamaño rodeado, de los edificios mas poderosos y emblemáticos del lugar. El de Cuernavaca me decepcionó. No solamente por su tamaño minúsculo, parecido al de cualquier plaza de pueblo chico, si no por el descuido general que padece. Este zócalo no parece un lugar central en la vida social de los habitantes de Cuernavaca.
A unas pocas cuadras barranca arriba está la Catedral de Cuernavaca con sus paredes llenas de historia. La catedral es la quinta iglesia católica que los Españoles erigieron en México. El edificio fue construido en 1537 como un convento religioso, razón por la cual no se parece a ninguna otra catedral en suelo Mejicano.
Los terrenos para su construcción fueron cedidos por quien fuera la mujer del adelantado Cortés para que en ellos funcione un monasterio Franciscano.
A diferencia de la mayoría de las iglesias, Cristo no se ve crucificado, si no que se lo ve en el momento de la ascensión.
Como otras en el estado de Morelos, también goza de ser Patrimonio Cultural UNESCO.
Particularmente interesantes son las misas de los domingos animadas por los Mariachis.
Todo el recinto es muy lindo y se supo conservar y cuidar el estilo de época. Los jardines del complejo son de una belleza singular, como así también el mural que se encuentra dentro de la misma.
La figura del caudillo sureño, Emiliano Zapata, se repite por doquier en Cuernavaca. Aquí es donde nació el revolucionario, uno de los mayores actores de la Revolución Mexicana.
Zapata nació en el seno de una familia de campesinos de la zona.
El Ayuntamiento de Cuernavaca fue construído en los primeros años del SXVII o fines del SXVI, como una típica casa rural. Con de los años, el edificio fue creciendo para poder albergar diferentes tribunales y juzgados. El primer piso era para uso personal del gobernador y su familia.
Varios cambios se sucedieron con el pasasr de los años. Hoy funciona como el Ayuntamiento de Cuernavaca. Dentro del edificio se encuentra el "Salón de cabildos" que guarda varios objetos valiosos de la ciudad, como una colección de mas de 100 sillas antiguas en donde se sentaban los disertadores en el cabildo. Ya veis. Imperdible, jajaja.
Hay enormes murales en sus paredes y techos, que nos cuentan la historia de México y de Cuernavaca, por ejemplo de cuando aquella vez, fuera la capital del país.
El edificio tiene un gran patio central adornado por una bella fuente. Del lado interno también se suceden los pasillos con arcos, pero también en el primer piso.
Si es tu primera vez en México, hay varias docenas de pueblos y ciudades con mas gracia y belleza.
El patrimonio de Cuernavaca no deja de ser importante. Verdad. Pero hay algo que falla y falta.
El clima es ameno, verdad. Quizás para tomarse un respiro del siempre ajetrado Distrito Federal, una visita a Cuernavaca no esta nada mal.
Cuernavaca, capital del estado de Morelos, es conocida como "La ciudad de la eterna primavera". Mucho de verdad hay en ello ya que su paisaje está colorido por miles de plantas con flor, como los tulipanes, jacarandás, jazmines o azucenas. Aparentemente su clima se encuentra entre los mejores del mundo. Sin embargo mi primera imagen fue la de una ciudad congestionada, sucia y muy ruidosa. Mi novia de aquel entonces me lo había advertido. Ella conocía Cuernavaca y no quería volver.
El Autopista lento como un domingo en hora pico. Mas tarde no fue fácil hacernos de un lugar para aparcar nuestro carro una vez que llegamos a la ciudad.
Por calles adoquinadas y de difícil caminar nos fuimos acercando al zócalo del lugar, como para comenzar por algún lado.
Desde los tiempos de los emperadores Aztecas, Cuernavaca fue adoptada como lugar de descanso para hombres que llegaban ahí por su benigno clima.
Con tan buen patrimonio histórico y arquitectónico de su pasado, y a tan poca distancia del Distrito Federal, es una lástima que no sepan sacarle mejor provecho. El descuido está ahí, a la vista de todos.
Paredes hacia adentro la cosa cambia. Hay muchas casas espectaculares y bien cuidadas, en donde se aprecia lo mejor del arte Mexicano en todo su esplendor.
Hubo un antes y un después en la historia de Cuernavaca. Es el terremoto que sufrió la ciudad de México en 1985. Fueron tantos los habitantes de la gran urbe que se mudaron al vecino estado, que Cuernavaca, La Ciudad de la Eterna Primavera, creció sin control alguno. Tanto, que hoy las lejanas serranías ya no se ven por el smog que tiene la atmósfera de Cuernavaca y sus pueblos satélites.
Ya de lejos se veía el Palacio de Cortés, una de las edificaciones del período virreinal más antiguas de todas entre las que aquí se encuentran, y uno de los platos fuertes de cualquier visita a Cuernavaca.
El pirata y conquistador Hernán Cortés uso esta fortificación como residencia en sus años en México.
Hoy en día, además de recorrer el palacio, que guarda un parecido muy grande con el Alcázar de Colón en Santo Domingo, República Dominicana, se puede visitar el Museo Cauhnáhuac que guarda celosamente toda la historia de Cuernavaca, desde la época prehispánica hasta la revolución campesina liderada por Emiliano Zapata.
Uno en México está acostumbrado a zócalos importantes y de gran tamaño rodeado, de los edificios mas poderosos y emblemáticos del lugar. El de Cuernavaca me decepcionó. No solamente por su tamaño minúsculo, parecido al de cualquier plaza de pueblo chico, si no por el descuido general que padece. Este zócalo no parece un lugar central en la vida social de los habitantes de Cuernavaca.
A unas pocas cuadras barranca arriba está la Catedral de Cuernavaca con sus paredes llenas de historia. La catedral es la quinta iglesia católica que los Españoles erigieron en México. El edificio fue construido en 1537 como un convento religioso, razón por la cual no se parece a ninguna otra catedral en suelo Mejicano.
Los terrenos para su construcción fueron cedidos por quien fuera la mujer del adelantado Cortés para que en ellos funcione un monasterio Franciscano.
A diferencia de la mayoría de las iglesias, Cristo no se ve crucificado, si no que se lo ve en el momento de la ascensión.
Como otras en el estado de Morelos, también goza de ser Patrimonio Cultural UNESCO.
Particularmente interesantes son las misas de los domingos animadas por los Mariachis.
Todo el recinto es muy lindo y se supo conservar y cuidar el estilo de época. Los jardines del complejo son de una belleza singular, como así también el mural que se encuentra dentro de la misma.
La figura del caudillo sureño, Emiliano Zapata, se repite por doquier en Cuernavaca. Aquí es donde nació el revolucionario, uno de los mayores actores de la Revolución Mexicana.
Zapata nació en el seno de una familia de campesinos de la zona.
El Ayuntamiento de Cuernavaca fue construído en los primeros años del SXVII o fines del SXVI, como una típica casa rural. Con de los años, el edificio fue creciendo para poder albergar diferentes tribunales y juzgados. El primer piso era para uso personal del gobernador y su familia.
Varios cambios se sucedieron con el pasasr de los años. Hoy funciona como el Ayuntamiento de Cuernavaca. Dentro del edificio se encuentra el "Salón de cabildos" que guarda varios objetos valiosos de la ciudad, como una colección de mas de 100 sillas antiguas en donde se sentaban los disertadores en el cabildo. Ya veis. Imperdible, jajaja.
Hay enormes murales en sus paredes y techos, que nos cuentan la historia de México y de Cuernavaca, por ejemplo de cuando aquella vez, fuera la capital del país.
El edificio tiene un gran patio central adornado por una bella fuente. Del lado interno también se suceden los pasillos con arcos, pero también en el primer piso.
Si es tu primera vez en México, hay varias docenas de pueblos y ciudades con mas gracia y belleza.
El patrimonio de Cuernavaca no deja de ser importante. Verdad. Pero hay algo que falla y falta.
El clima es ameno, verdad. Quizás para tomarse un respiro del siempre ajetrado Distrito Federal, una visita a Cuernavaca no esta nada mal.
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